Ginebra Los Tornos14 de marzo de 2023Piadoso retrato de Wilde y su decadencia, a través de los recuerdos de Gide, hasta su muerte. Cuenta que en su cortejo fúnebre había siete personas, unas pocas flores y una sola inscripción, del propietario del hotel donde la espichó, que decía lacónicamente: "À mon locataire" (a mi huésped, o inquilino). Bien pagado fue Wilde de Gide con este pequeño opúsculo.